
La miopía, un problema refractivo que provoca dificultad para enfocar objetos lejanos, ha alcanzado niveles preocupantes a nivel mundial, especialmente entre los niños.
Este aumento se atribuye a factores genéticos y ambientales, como el incremento del tiempo en actividades de visión cercana y la reducción de tiempo al aire libre. Ante este panorama, el control de la miopía se ha convertido en una prioridad en salud visual para prevenir complicaciones a largo plazo.
Para nuestras ÓPTICOS-OPTOMETRISTAS es importante tener claro cuáles son los objetivos a alcanzar en el control de la miopía en niños y adolescentes, y las principales técnicas ópticas disponibles a aplicar.
Objetivos del Control de la Miopía
El control de la miopía en niños tiene como metas principales:
1. Reducir la progresión de la miopía: La prioridad es desacelerar el alargamiento axial del ojo, que es el principal responsable del aumento en las dioptrías y de los riesgos asociados.
2. Prevenir complicaciones oculares futuras: Una miopía alta incrementa el riesgo de enfermedades como el desprendimiento de retina, glaucoma, cataratas y degeneración macular miópica.
3. Mejorar la calidad de vida: Una menor progresión de la miopía reduce la dependencia de correcciones ópticas más fuertes y las limitaciones funcionales que estas pueden implicar.
4. Promover el desarrollo visual saludable: Mantener un crecimiento ocular equilibrado durante los años de mayor desarrollo visual puede evitar daños irreversibles en la visión.
Técnicas Ópticas para el Control de la Miopía
Existen diversas técnicas ópticas diseñadas para controlar la progresión de la miopía y como Ópticos-Optometristas expertas en ello, en nuestro Centro Óptico desarrollamos y aplicamos las más efectivas:
1. Lentes de Contacto de Ortoqueratología (Orto-K)
- Descripción: Son lentes semirrígidas permeables al gas diseñados para usarse durante la noche. Básicamente lo que hacen es remodelar temporalmente la curvatura de la córnea, permitiendo una visión clara durante el día sin necesidad de corrección (como las lentes Paragon CRT)
- Mecanismo: Generan un desenfoque periférico controlado, lo que ayuda a ralentizar el crecimiento axial del ojo.
- Eficacia: Pueden reducir la progresión de la miopía entre un 60% y un 90%, y en algunos casos hasta el 99%.
2. Lentes de Contacto Blandas de Diseño Especializado
- Descripción: Lentes multifocales o específicamente diseñados para el control de la miopía. Incluyen zonas ópticas que inducen un desenfoque periférico mientras corrigen la visión central (como las MiSight de CooperVision).
- Beneficios: Son cómodos y adecuados para niños con estilos de vida activos.
- Eficacia: Estudios muestran una reducción de la progresión entre un 40% y un 60%.
3. Lentes Oftálmicas Especializadas
- Descripción: Lentes para gafas diseñados con tecnología de desenfoque periférico o control de miopía (como los lentes MiYOSMART de Hoya).
- Mecanismo: Al igual que las lentes de contacto, crean un desenfoque periférico para frenar el crecimiento del ojo.
- Ventajas: Son menos invasivas y fáciles de usar, lo que los convierte en una opción ideal para niños pequeños.
- Eficacia: Pueden ralentizar la progresión de la miopía entre un 30% y un 60%.
Metodología del Control de Miopía en nuestro Centro Óptico
1. Evaluación individualizada: Cada persona tiene necesidades únicas, por lo que es fundamental realizar un diagnóstico detallado y diseñar un plan personalizado.
2. Compromiso de los pacientes y las familias: Es crucial que los niños y adolescentes comprendan la importancia del control de la miopía y participen TODOS activamente en el tratamiento.
3. Seguimiento regular: Las revisiones periódicas de control y seguimiento son fundamentales para evaluar la efectividad del tratamiento y realizar ajustes si fuera necesario.
Conclusión
El control de la miopía en niños y adolescentes es esencial para proteger su salud visual a corto y largo plazo. Las técnicas ópticas, como la ortoqueratología, los lentes de contacto especializados y las gafas con diseños innovadores, ofrecen soluciones efectivas para reducir la progresión de esta condición. Sin embargo, el éxito depende de un enfoque integral que combine tecnología, seguimiento profesional y hábitos visuales saludables.
Adoptar medidas tempranas puede marcar una gran diferencia en la calidad de vida visual de los niños y adolescentes, y prevenir complicaciones graves en el futuro.
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